La veeduría de la vía que conecta Florencia, San Vicente del Caguán, Balsillas y Neiva ha estado atenta desde el inicio de las emergencias viales, manteniendo informados a los ciudadanos y gestionando con los encargados del mantenimiento. Recientemente, un veedor realizó un recorrido por la vía Puerto Rico-San Vicente, la cual presentó un cierre debido a un derrumbe.
La carretera requiere mantenimiento, ya que existen puntos críticos que no han sido atendidos adecuadamente durante el verano. Luis Ángel Morales, veedor, señaló que estos puntos críticos llevan bastante tiempo sin atención, lo que provoca problemas graves con las lluvias, causando bloqueos y erosión. Aunque hay maquinaria trabajando y el contratista interviene cuando ocurre un derrumbe, la atención no es suficiente ni permanente.
Esta situación afecta la economía y el gremio de transportadores, además de alterar la agenda de las personas que necesitan desplazarse a Florencia. Morales sugiere que se realicen sesiones de los comités municipales y departamentales de gestión de riesgos para tratar el tema, así como un debate de control político por parte de la Asamblea Departamental sobre el avance de esta importante obra para el departamento de Caquetá.