En un encuentro convocado por la Red Hospitalaria del Caquetá se expuso la grave situación a la que se enfrentaría el sector salud en este departamento, de llegarse a liquidar la EPS Asmet Salud que atiende en el Caquetá 321.000 afiliados y genera 3.100 empleos directos.
En la reunión participaron 21 de las 27 instituciones que prestan el servicio de salud en el Caquetá, medios de comunicación, el Representante a la Cámara Jhon Fredy Núñez y delegados de la Representante Gilma Díaz y Mauricio Cuéllar. La falta de pago de una cartera que suba más de 78.000 millones de pesos que adeuda Asmet Salud y de la que nadie se hace responsable, tiene amenazado el sector salud en el Caquetá.
De este monto, un poco más de 44.000 millones de pesos están en proceso de recuperación por parte del Hospital Departamental María Inmaculada. En el momento existen acuerdos de pago con las diferentes empresas prestadoras del servicio, que la EPS ha estado cumpliendo. Recursos que al dejar de recibir pondrá en riesgo no solo el funcionamiento de las entidades a nivel administrativo, sino que colapsaría a nivel asistencial o centros de salud en los diferentes niveles.
Los representantes de la red hospitalaria lanzan un SOS y piden la intermediación de las autoridades políticas y administrativas, o para que el gobierno nacional estudie la magnitud de la problemática de la salud en el departamento y prevenga con acciones claras en el impacto negativo que a nivel social, representaría para este territorio la liquidación de la EPS en mención. Como conclusión del encuentro se espera la intervención y el apoyo de los congresistas como actores políticos, quienes se han comprometido a ser mediadores ante el Ministerio de Salud y Protección Social y la superintendencia, para propiciar los espacios necesarios y exponer el caso con el propósito de analizar las posibles soluciones a la crisis que se avecina en el tema de la salud en el Caquetá.