El lunes anterior se llevaron a cabo las exequias del subintendente Julián Andrés Garzón Giraldo, quien murió en extrañas circunstancias el sábado anterior en la estación de policía del municipio de Curillo. Se ha dicho que el uniformado fue hallado muerto con un disparo en la cabeza en una cama en horas de la madrugada cuando se encontraba en la estación de policía de ese municipio, en un aparente caso de suicidio.
Sin embargo, la mamá del uniformado, Martha Lucía Giraldo Duque, pidió que se investiguen las causas de su muerte porque está segura de que él no se quitó la vida. Ella afirma que no tenía motivos económicos, sentimentales ni familiares para tomar esa decisión.
Garzón Giraldo llevaba 20 años en la institución policial y, al momento de su muerte, hacía parte del esquema de seguridad del alcalde de Curillo, Javier Villanueva Posso. Su trágico fallecimiento ha dejado un profundo dolor entre sus compañeros de trabajo, familiares y amigos, quienes se encuentran consternados y buscan respuestas sobre los motivos que lo llevaron a tomar esta drástica decisión.
Las autoridades locales están llevando a cabo las investigaciones pertinentes para esclarecer las circunstancias alrededor de este lamentable incidente. Por ahora, no hay un pronunciamiento oficial de la Policía Nacional sobre el caso.
